"En enero y febrero, el que no tenga un generador, vaya comprándolo". La frase que la canciller Diana Mondino dijo ante los industriales en 2023 oficia como una premonición de lo que podría ser este verano. Es que un informe de Cammesa brindó un panorama desalentador en relación a los cortes de luz masivos.

El portal EconoJournal reveló un informe técnico del 25 de junio en el que se advierte que hay un alto riesgo de que se produzcan cortes de luz masivos en los próximos meses, cuando llegue el calor.

Esto podría ocurrir dado que no habría generación de energía eléctrica suficiente durante los picos de consumo, al tiempo que observaron faltantes en las líneas de transmisión.

Según el informe elaborado por los técnicos de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa), entre diciembre y marzo del 2025 el sistema eléctrico de la Argentina alcanzaría una demanda de potencia máxima de entre 30.500 y 30.700 megavatios (MW).

El alerta nace porque existe riesgo de no poder cubrir entre 1.000 y 3.000 MW, hasta el 10% del total. El récord histórico de demanda se produjo el 1 de febrero de 2024, cuando la temperatura media en el AMBA superó los 31°C.

"La probabilidad de abastecer el pico máximo con las reservas requeridas es del 80,9%", señala el documento, que observa un 19% de probabilidad de "requerir medidas operativas adicionales" como disminuir la capacidad de reservas o empezar con los cortes programados de energía. Asimismo, señala que "con una oferta adicional de 3.000 MW" la probabilidad de cubrir el pico asciende al 97 por ciento.

"Cualquier indisponibilidad adicional en la oferta o en el transporte podrá presentar déficit en abastecer" a la demanda, advierten los técnicos. Es decir, si faltan combustibles, hay sequía, falla alguna de las dos centrales nucleares (Atucha I entra en proceso de extensión de vida) o corre poco viento, la situación empeorará.

En concreto, los principales problemas podrían ocurrir del 27 de febrero al 12 de marzo de 2025, dado que en el Gran Buenos Aires podría superar la demanda de 11.200 MW de marzo 2023 y tener sobrecargas en sus líneas de alta tensión.