En otro momento, con Boca 0-1 abajo en una llave eliminatoria de la Copa Libertadores, definir en la Bombonera representaría un cheque al portador. Casi una garantía de victoria. Pero transmite tan poco este equipo de Fernando Gago y fue tan desencantadora la imagen que dejó hace una semana en la capital peruana, que la multitud xeneize irá al viejo estadio de la Ribera confiada en la victoria. Pero también temiendo lo peor: que Boca empate o pierda con Alianza Lima y se quede afuera de las copas continentales de 2025. Con el 1 a 0 a favor, habrá tiros desde el punto del penal. Con un triunfo por dos goles de diferencia, Boca avanzará a la tercera y definitiva fase en la que enfrentará al ganador del cruce entre Independiente Santa Fe de Colombia e Iquique de Chile (en la ida ganaron los chilenos 2 a 1). El partido dará comienzo a las 21.30 y será arbitrado el chileno Piero Maza y transmitido por Telefé y Fox Sports.

En la lista de concentrados, Gago entregó algunos indicios de lo que piensa hacer: en primer lugar, dispuso la vuelta del capitán Edinson Cavani, ya recuperado de una fractura de vértebra que lo había marginado de los últimos cuatro partidos. Tal vez Cavani no alcance a completar todo el partido. Pero su oficio para las paradas grandes resulta indispensable  En esta misma línea, Carlos Palacios y Ayrton Costa, los refuerzos que mejor imagen dieron hasta ahora, también retornaron a la concentración y todo indica que serán titulares. El chileno dejó atrás un leve cuadro febril que trajo de Perú y el zaguero se rehabilitó de una distensión muscular en el biceps femoral derecho. Si Marcos Rojo arranca como titular, Costa podría jugar como lateral izquierdo.

Por lo que trascendió luego de la última práctica, la idea de Gago sería jugar con un 4-3-1-2, muy distinto de su tradicional 4-3-3. El chileno Palacios, se pararía como enganche por detrás de los uruguayos Merentiel y Cavani. Ander Herrera, el juvenil Milton Delgado y el otro chileno Williams Alarcón compondrian la media cancha y en el fondo irían Advíncula, Battaglia, Rojo y Saracchi o Costa, con Marchesin en el arco. Todo en un plano conjetural porque el técnico también podría optar por empezar con tres delanteros en cuyo caso Exequiel Zeballos podría empezar por la izquierda.

Alianza Lima nunca ganó en Buenos Aires por la Copa Libertadores y las dos últimas veces que se presentó porla fase de grupos, en 2018 Boca le hizo cinco y River ocho en 2022, la noche de los seis goles de Julián Alvarez. Sería una hazaña aguntar la diferencia y pasar de ronda para el equipo de Néstor "Pipo" Gorosito, Viejo zorro del fútbol, Gorosito salió a crear clima y a victimizarse de antemano en la conferencia de prensa posterior al partido de ida, tratando de condicionar al árbitro chileno Piero Maza.

Los peruanos llevarán el partido a la larga especulando con que pasen los minutos y Boca no pueda igualar la serie. La duda pasa por si tendrán la solidez anímica y futbolística para hacerlo. También es una incógnita como responderá Boca ante la misma situación. Al equipo le costó superar por el Torneo Apertura a rivales a priori muy accesibles como Independiente Rivadavia, Banfield y Aldosivi. Y la Bombonera reaccionó muy mal, con gritos, silbidos e insultos, en los momentos de mayor confusión y cuando peor salían las cosas. Los jugadores y Gago saben que es un partido bisagra, sin margen para dar un paso en falso. Quedarse afuera de las copas continentales de 2025 no es una opción para Boca.