Nacionales 06/03/2025
El Pontífice aumentó su actividad física, llamó al sacerdote católico de Gaza, como ha hecho durante toda su internación, y celebró el inicio de la Cuaresma al recibir cenizas en la frente.
La salud del papa Francisco evoluciona, tras 20 días de internación por una infección respiratoria y, de acuerdo al último parte dado a conocer desde el Vaticano, habría experimentado cierta mejoría, respecto a los últimos episodios de broncoespasmo que obligaron a darle asistencia respiratoria mecánica no invasiva.
Según se informó, el Pontífice aumentó su actividad física, llamó al sacerdote católico de Gaza, como ha hecho durante toda su internación, y celebró el inicio de la Cuaresma al recibir cenizas en la frente.
Jorge Bergoglio, por fortuna, "no sufrió crisis respiratorias durante el día, recibiendo oxígeno a través de un tubo nasal" y durante la noche "reanudará el uso de una máscara mecánica no invasiva", precisó el parte.
En tanto, durante la mañana "participó en una celebración del Miércoles de Ceniza, recibiendo cenizas y la Sagrada Comunión". Luego, según se difundió, "se puso a trabajar", lo que incluyó una llamada al padre Gabriel Romanelli, el sacerdote argentino que es el párroco de la iglesia de la Sagrada Familia en Gaza.
No obstante, el pronóstico general del estado de salud del Pontífice por el momento sigue siendo reservado. Desde la internación el 14 de febrero en el Hospital Gemelli, los médicos no han dejado de señalar que su situación es "complicada", ya que a la bronquitis crónica asmática por la que fue internado se le sumó una neumonía bilateral.
Inicio de la Cuaresma
Los cardenales celebraron este miércoles el comienzo de la Cuaresma Católica y el cardenal italiano Angelo De Donatis leyó la homilía preparada por el Papa para la misa del Miércoles de Ceniza.
"Esta tarde las cenizas sagradas serán esparcidas sobre nuestras cabezas. Reavivan en nosotros la memoria de lo que somos, pero también la esperanza de lo que seremos. Nos recuerdan que somos polvo, pero nos conducen hacia la esperanza a la que estamos llamados, porque Jesús descendió al polvo de la tierra y con su resurrección nos arrastra consigo al corazón del Padre", escribió Bergoglio. Y añadió: "Esta condición de fragilidad nos recuerda el drama de la muerte, que en nuestras sociedades de apariencia intentamos exorcizar de muchas maneras y marginar incluso de nuestras lenguas, pero que se impone como una realidad con la que debemos lidiar, signo de la precariedad y fugacidad de nuestra vida", subrayó el Pontífice.
La celebración del Miércoles de Ceniza da inicio a la Cuaresma, el período de cuarenta días que precede a la Pascua. En la misa de este día los feligreses reciben cruces de ceniza en sus frentes.
En tanto, la ciudad de Roma ya recibe a miles de fieles llegados de todo el mundo para participar del Jubileo del Mundo del Voluntariado, que se celebrará este fin de semana en el Vaticano. Se calcula que entre 25 mil y 30 mil peregrinos participarán de la celebración, que además de la presencia de unos 10 voluntarios italianos contará con numerosos grupos llegados desde Argentina, Polonia, México Colombia, Australia, Chile, Ecuador y la India. (DIB) ACR
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